La ciudad de San Fernando sigue avanzando en su compromiso con la lucha contra la emergencia climática y con los objetivos para el Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas (ONU). Así, el municipio isleño pasará a consumir electricidad 100% verde, acercándose cada vez más al reto final de convertirse en una ciudad ecoeficiente. De este modo, el alumbrado, los semáforos, los edificios y las distintas infraestructuras públicas funcionarán con energía limpia, lo que se traduce en que anualmente San Fernando dejará de liberar a la atmósfera 3.895 toneladas de CO2.
El nuevo contrato firmado con Iberdrola por valor de más de 2,4 millones de euros significa un paso más en la alianza municipal con el planeta. Hay que recordar que ya la ciudad consiguió cumplir con el objetivo que se estableció en 2020, gracias a las distintas medidas y políticas impulsadas por el equipo de Gobierno local, con una reducción de las emisiones de CO2 de un 20,78%.
La ciudad tiene la misión de reducir sus emisiones en el término municipal un 55% en 2030 respecto a 1990 hasta alcanzar la neutralidad climática en el año 2050. Asimismo, y en la línea del Pacto de Alcaldías para el Clima y la Energía Sostenible rubricado en 2009, la ciudad trabaja para que en 2030 al menos un 42% del consumo de energía final bruta tenga un origen renovable.